Internet es demasiado grande. Sin lugar a dudas es el mayor conglomerado de información existente en el mundo. Muy pocos temas (nos animamos a pensar que ninguno) no tienen hoy un lugar en Internet.
Según organizaciones que estudian la evolución de la Web existen aproximadamente 200 millones de páginas publicadas, que se duplican en forma semestral.
Así dicho puede que inmovilice a aquel que desee encontrar información sobre algún tema en ella. Pero no todo está perdido y existen herramientas para solucionar este obstáculo uno de los más importantes a tener en cuenta en el trabajo con Internet en el ámbito educativo.
Según organizaciones que estudian la evolución de la Web existen aproximadamente 200 millones de páginas publicadas, que se duplican en forma semestral.
Así dicho puede que inmovilice a aquel que desee encontrar información sobre algún tema en ella. Pero no todo está perdido y existen herramientas para solucionar este obstáculo uno de los más importantes a tener en cuenta en el trabajo con Internet en el ámbito educativo.
¿Qué significa buscar en internet?
Para resolver este dilema plantearemos una comparación.
Cuando queremos encontrar algo en un lugar desordenado o de extensiones muy grandes, y el elemento a buscar es más bien pequeño o difuso, generalmente utilizamos la frase "es como buscar una aguja en un pajar". Rápidamente podríamos asimilar esta frase a las búsquedas que uno debe hacer para encontrar la información en Internet.
Sin embargo no es así. Buscar una aguja en un pajar es tratar de ubicar "el elemento diferente" en un conjunto. En nuestro caso es más complicado. Lo que buscamos es información dentro de un conjunto (por cierto enorme) de informaciones. Por lo que no estamos buscando una aguja, sino una paja de diferente tamaño o grosor.
Es por ello que esta estructuración desordenada de la información en el ciberespacio ha desarrollado una serie de herramientas que catalogan, ordenan, clasifican y localizan los temas que interesan a los usuarios de Internet.
Estos mecanismos automatizados de búsqueda utilizan un tipo de software denominado "spiders" (arañas) que se deslizan a través de la Web (red) visitando millones de páginas y guardando en enormes bases de datos las direcciones y la información solicitada (título, texto, imágenes, etc.) sobre cada lugar visitado de cada una.
Estas grandes bases de datos son conocidas genéricamente con el nombre de buscadores.
Cuando queremos encontrar algo en un lugar desordenado o de extensiones muy grandes, y el elemento a buscar es más bien pequeño o difuso, generalmente utilizamos la frase "es como buscar una aguja en un pajar". Rápidamente podríamos asimilar esta frase a las búsquedas que uno debe hacer para encontrar la información en Internet.
Sin embargo no es así. Buscar una aguja en un pajar es tratar de ubicar "el elemento diferente" en un conjunto. En nuestro caso es más complicado. Lo que buscamos es información dentro de un conjunto (por cierto enorme) de informaciones. Por lo que no estamos buscando una aguja, sino una paja de diferente tamaño o grosor.
Es por ello que esta estructuración desordenada de la información en el ciberespacio ha desarrollado una serie de herramientas que catalogan, ordenan, clasifican y localizan los temas que interesan a los usuarios de Internet.
Estos mecanismos automatizados de búsqueda utilizan un tipo de software denominado "spiders" (arañas) que se deslizan a través de la Web (red) visitando millones de páginas y guardando en enormes bases de datos las direcciones y la información solicitada (título, texto, imágenes, etc.) sobre cada lugar visitado de cada una.
Estas grandes bases de datos son conocidas genéricamente con el nombre de buscadores.
POSIBLES CLASIFICACIONES DE LOS BUSCADORES
En la actualidad existen cientos de buscadores. Sin embargo, en una primera diferenciación, se pueden clasificar a partir de las siguientes variables.
a) El tamaño de las bases (desde cientos de páginas a millones)
b) La extensión que abarcan (en este caso pueden guardar páginas de todo el mundo o de cierta región o país)
c) La lógica de búsqueda (forma en que se va localizando las palabras y/o temas solicitados)
d) La frecuencia de actualización de las bases de datos.
e) La rapidez de localización de información.
Del punto c) se deriva otra posible clasificación, más apoyada sobre los mecanismos de búsqueda y la estructuración de la información, que es la siguiente:
a) Clasificadores o buscadores de categorías (también conocidos como Índices o Directorios:
Organizan y clasifican la información en forma jerárquica y estructurada en temas y subtemas de acuerdo al criterio elegido por las personas que lo diseñaron. Acotan la búsqueda hacia el tema que se desea encontrar. Sin embargo, existe la probabilidad de que la información buscada no exista en esa jerarquía, por lo que se deberá iniciar nuevamente la búsqueda por otro tema o nivel.
b) Buscadores de contenido (o de palabras por contexto o palabra clave).
Se encargan de rastrear la solicitud en toda la información disponible en las bases de datos. Pese a ser una búsqueda más desordenada son más rápidas y de mayores resultados. Pese a ello muchos de los datos entregados son irrelevantes o no relacionados al tema solicitado por lo que muchas veces se producen nuevas pérdidas de tiempo en búsquedas estériles. Para solucionar estos inconvenientes muchos de los buscadores importantes han incluido búsquedas por Directorios o Índices a la manera de la opción a).
Se encargan de rastrear la solicitud en toda la información disponible en las bases de datos. Pese a ser una búsqueda más desordenada son más rápidas y de mayores resultados. Pese a ello muchos de los datos entregados son irrelevantes o no relacionados al tema solicitado por lo que muchas veces se producen nuevas pérdidas de tiempo en búsquedas estériles. Para solucionar estos inconvenientes muchos de los buscadores importantes han incluido búsquedas por Directorios o Índices a la manera de la opción a).
Por lo dicho queda claro que el éxito de una búsqueda no sólo tendrá que ver con la estructura del buscador elegido sino también con la expertiz y los criterios seleccionados previamente por el usuario.
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